jueves, 3 de diciembre de 2015

Investigación.

En nuestra investigación sobre  La trata de personas en Colombia se encontraron dos artículos fundamentales para el análisis de este fenómeno global. Por un lado El texto de Helga Flamtermesky “Mujer frontera. Experiencia de Investigación Acción Participativa Feminista (IAPF) con mujeres víctimas de la trata de personas.” y por el otro lado el texto de Mónica Hurtado y Catherine Pereira “Dinámica del comercio ilícito de personas: el caso de Colombia- Oriente Asiático. A continuación se dará una breve descripción de cada texto respectivamente y por consiguiente se realizará un breve análisis de las perspectivas de autores como Michel Foucault y Emmanuel Lévinas expuesto en clase y los cuales serán articulado con las principales ideas de cada artículo.

Como primera medida, el texto de Helga Flamtermesky muestra una relación absolutamente directa entre la trata de personas y la construcción social de lo humano ya que este artículo es una investigación la cual trabaja con las algunas víctimas de trata de personas las cuales de una u otra manera manifiestan los errores tan grandes y comunes que hay en cuanto al manejo que se le da al proceso que estas mujeres tienen que vivir luego de ser víctimas de este delito, es decir, las mujeres quienes logran terminar de una u otra manera este vínculo que tienen con las redes de trata de personas.

Es fundamental e impactante ver la forma como estas mujeres sienten que no son visibles en la sociedad, asimismo sienten que no son parte de la sociedad a la que se están reintegrando ya que los mecanismos que se tienen para darles una recuperación adecuada no son manejados de la manera adecuada y se encuentran allí “para ellas pero sin ellas” (Flamtermesky, p3). De esta manera por más de que estas víctimas intenten volver a rehacer su vida sienten que es bastante difícil ya que la sociedad no comprende la magnitud real que tiene el hecho de haber sido víctima de un delito tan cruel como la trata de personas.

En cuanto a la formación de lo humano partiendo de la trata de personas y de la investigación de Flamtermesky podemos decir que para las mujeres quienes han sido víctimas de este delito lo humano se constituye a partir de la concepción y aceptación social y contextual de la gravedad de este delito, asimismo la constitución de lo humano se da a partir del hecho de que estas mujeres reconocen algunos términos con los cuales se identifican, sin embargo es importante no profundizar en ellos ya que aunque se identifican no es aquello que las caracteriza por lo tanto aunque son términos sociales y contextuales mediante los cuales ellas se ven reflejadas también es fundamental comprender que si bien esto es parte de su pasado son términos con los cuales deben desanclarse en cierta medida para poder llevar a cabo planes de vida por fuera del marco de ser víctimas de trata de personas (Flamtermesky, p6).

Sin embargo es relevante mostrar que lo humano se constituye desde la perspectiva de estas mujeres también gracias a  descolonizar los cuerpos y los conocimientos y de esta manera poder determinar, identificar y de cierta manera delimitar los límites,  valga la aclaración, que la sociedad impone en cuanto a factores de gustos, personalidades, color de piel, entre otros factores (Flamtermesky, p9).

Por lo tanto, en la actualidad y según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las cifras de mujeres las cuales son víctimas de trata de personas han aumentado en la última década,  por esta razón consideramos pertinente esta problemática para trabajarla a lo largo de todo el semestre ya que esta asignatura de Formación Social de lo Humano es una puerta más para conocer las diferentes perspectivas que se tienen desde diferentes áreas del conocimiento sobre lo humano, nos iba a permitir tener en cierta medida un acercamiento más real a la actualidad, asimismo cuando decidimos trabajar este tema tuvimos en cuenta que es una problemática que a nosotras como futuras psicólogas de una u otra manera nos puede tocar, pero desde otro punto de vista es una temática que como seres humanos quienes vivimos en un contexto donde este delito es tan común debe preocuparnos.

A lo largo del semestre trabajamos el tema de la formación de lo humano desde ideales como los de; los mecanismos del poder de Foucault, y la idea del otro de Lévinas. Mediante estos dos autores pudimos tener un acercamiento fundamental para comprender la unión que se genera entre la teoría y la realidad, específicamente la Colombiana en cuanto al delito de la trata de personas
Por otro lado, es importante tener en cuenta como sociedad que debemos entender la importancia de proteger y cuidar de nosotras mismas y de todas las mujeres que nos rodean.

Por tanto, es evidente que en Colombia,  el comercio ilícito de la trata de personas se ha incrementado en los últimos años. Lo delicado de la problemática es que a causa de la frecuencia de este fenómeno, la sociedad ha generado una condición humana de indiferencia, inseguridad e incertidumbre gracias a los peligros que acecha la contemporaneidad que amenaza nuestra dignidad, integridad, privacidad, nuestros derechos, nuestra calidad de vida, entre otros. Es así, como las sujetos víctimas de Trata de personas sufren a diario, puesto que los individuos que lograron salir de este sometimiento viven con la incertidumbre e inseguridad de que otra vez vuelvan a caer en esta red o por el contrario sean perseguidas por los tratantes, quienes violentan su privacidad y finalmente terminan violentando  el derecho a la vida del individuo.

En el artículo “Dinámica del comercio ilícito de personas: el caso de Colombia Oriente Asiático” por Hurtado y Pereira (2012), relata el caso de una víctima quien logró escapar de la trata de personas y que a los dos meses concluyó su vida a causa de la “deuda pendiente” con los tratantes; además explica cómo estos tipos de redes ilícitas  han incrementado y se han sostenido económicamente gracias otras redes como la mafia y los micro negocios que se lucran con esta red ilícita. Lo interesante de este artículo es como da a entender las relaciones de poder que se dan dentro de estas organizaciones tanto locales, nacionales e internacionales; como expone los diferentes tipos de víctimas de la trata de personas y como se da el reclutamiento, traslado y explotación de estas. A continuación, se dará a conocer algunas de las perspectivas de autores como Michel Foucault y Emmanuel Lévinas los cuales serán articulados con las principales ideas del texto de Huertas y Pereira.

Como primera medida se conoce que las relaciones de poder se generan con base a una acción, es decir una acción conlleva a otra acción. Ahora bien, no hay que olvidar que cada sujeto tiene su historia y su contexto y que a partir de este conocimiento se empieza a formar el individuo como sujeto dentro de una sociedad. Así pues, se hará hincapié al segundo planteamiento de Foucault (1991) que señala que  “La objetivación del sujeto en lo que yo llamaré “práctica de escisión”. El sujeto está escindido en sí mismo o separado de los otros. Este proceso lo objetiviza.” (p. 52).

Acorde con el planteamiento de Foucault, las víctimas se forman como sujetos en un contexto degradante como lo es el negocio de la trata de personas, muchas de las víctimas que logran salir de esta red son aisladas y muchas veces discriminadas por dicho suceso. Ahora bien, si se analiza la  relación entre víctimas y victimarios se genera un total sometimiento de una persona a la otra, por tanto como lo afirma Hurtado y Pereira (2012) “ Las víctimas dejan de ser sujetos y se convierten en objetos incapaces de ejercer su voluntad, y es de este modo como las redes logran explotarlas.” (p. 171). En consecuencia se genera una relación basada en la inequidad de los individuos, en la represión e inferioridad de otros lo cual no generaría una “sana” relación de poder entre individuos y que como resultado se dan aquellas formas de resistencia para desintegrar estas relaciones.

También cabe resaltar, que este tipo de luchas y resistencias se llevan a cabo con el objetivo no dé a atacar a la institución como tal sino a la forma como se da esas relaciones de poder Foucault (2012). Esto se puede observar en los diferentes “tipos” de víctimas que se encuentran en estas organizaciones según las investigaciones de Hurtado y Pereira (2012). Existe las víctimas de trata de personas que son engañadas por el tratante acerca de las condiciones y la labor que van a desempeñar en el exterior. Otro tipo de víctima ya sabe que labor va a ir a desempeñar (como trabajadora sexual) pero que es engañada respecto a las condiciones y la paga que el tratante ofrece. Por último, existe otro tipo de víctima (aunque no es tan frecuente), que sabe a qué condiciones y a qué actividad será sometida y aun así acepta las condiciones.

En este sentido, la verdadera problemática no está en el trabajo sexual puesto que algunas personas se movilizan en esta labor, sino en la condiciones y en el trato que se le da a estas personas, como su subjetividad se ve gobernada  con base a sometimientos, e irregularidades en la relaciones de poder que se supone que se deben llevar a cabo de manera recíproca. En relación a lo anterior, también se comprende la relación externa entre las organizaciones locales, nacionales e internacionales que todas juntas generan una gran red de la trata de personas. En estas relaciones de poder no solo se encuentran los tratantes o proxenetas sino también las personas que ofrecen el lugar, las que brindan ropa y artículos necesarios para la labor que se le fue asignada a la víctima, en tráfico de drogas entre otros son relaciones que refuerzan el este tipo de negocios ilícitos a nivel mundial.

Por otro lado y ahora desde  el artículo Mujer frontera. Experiencia de Investigación Acción Participativa Feminista (IAPF) con mujeres víctimas de la trata de personas en relación con los planteamientos de Michel Foucault las relaciones de poder son un modo de acción que se ejerce por un ente opresor sobre un ente que se encuentra oprimido, es decir las relaciones de poder se ejercen desde unos cuerpos a otros cuerpos (1991). Teniendo en cuenta lo anterior y en relación con el delito de la trata de personas, es notorio poder identificar que las personas las cuales se encuentran en la parte de arriba de las redes de tratantes ejercen acciones de poder sobre sus víctimas.

“La IAPF puede ser una metodología de resistencia y contestataria. “En este fragmento del artículo de Flamtermesky (2014)  se puede observar que las mujeres quienes son parte de este grupo son una manera para acabar con los mecanismos de poder ya que por este medio generan resistencia. La resistencia es la manera como los sujetos quienes están oprimidos de una u otra manera manifiestan su inconformidad ante las acciones que se están tomando sobre ellos (Foucault, 1991).

Teniendo en cuenta las frases presentadas por Flamtermesky se articulan de una manera exitosa con los pensamientos de Levinas, citado por Aguirre (2006) ya que se expresa que como resultado de la modernidad tenemos hoy en día las instituciones que buscan mantener el cumplimiento de los derechos de las personas de manera justa “Ello influyó, obviamente, en nuestra sociedad, al instaurarse instituciones que se fundamentaron en un principio de igualdad, en el primado de una razón “justa” que correspondiera a la cordura y al buen juicio” (p,5) Sin embargo según lo que se expresa en la investigación, las instituciones actuales que ayudan a las mujeres quienes fueron víctimas de trata de personas no cumplen con este pilar del buen juicio y una razón justa ya que de una u otra manera no las contemplan a ellas para los procesos de ayuda que permiten que estas mujeres vuelvan a llevar su vida.

Asimismo Aguirre citando a Lévinas  (2006) expresa que: “En conclusión, nuestra relación con el Otro no se da de un modo abstracto sino que nos compromete existencialmente; nuestra mirada hacia el Otro exige estar en un plano trascendente, donde la sensibilidad no sea la determinante, sino donde el Otro se muestre a la mirada pero no se revele en ella, donde su Rostro no nos deja indiferentes.” (p,12)  sin embargo pareciera que en el delito de la trata de personas esto no se cumple ya que en este delito las víctimas nunca serán tomadas en cuenta como lo dicen los planteamientos de Flamtermesky y las investigaciones sobre este tema las mujeres víctimas son humilladas y su rostro es indiferente ante sus captores.

Por otra parte, en relación a los planteamientos de Lévinas citados por Aguirre y Jaramillo (2006), respecto al conocimiento del otro,  y relacionándolo con el artículo de Hurtado y Pereira (2012) , se entiende que, este conocimiento puede brindar riquezas, dicho de otra manera, estas relaciones de víctimas y victimarios pueden generar vínculos como lo menciona el artículo respecto a víctimas que consideran quedarse y trabajar con la organización, víctimas que se relacionan con el tratante y generan un vínculo tal vez emocional y en especialmente laboral. Es claro que este tipo de caso no se generan a diario, aun así es interesante analizar cómo esa interacción que un principio no fue agradable se convierte por voluntad propia de la misma víctima un proyecto de vida. Sin embargo, cabe aclarar que son poco los casos que se exponen de esta manera.

Generalmente, lo casos de engaño y usura son más conocidos en la trata de personas. Lo fundamental de esta articulación es como se da el conocimiento de la víctima al victimario como lo señala Aguirre y Jaramillo (2006) citando a Lévinas “en la relación, el Otro “permanece al nivel de quien lo recibe, sigue siendo terrestre. Esta presentación es la no- violencia por excelencia, porque, en lugar de herir mi libertad, la llama a la responsabilidad y la instaura” (Ibíd. p. 216)” (p.15).
Es así como la relación se debe dar de manera recíproca porque, de esta manera garantiza la seguridad de la persona, la libertad, y un verdadero conocimiento de la subjetividad e infinidad del otro. Ahora bien, si se contrasta con la relación de víctima y victimario, cabe citar a Hurtado y Pereira (2012) “Las redes dan a sus víctimas información abiertamente falsa, o al menos incompleta. Los tratantes obtienen suficiente información sobre la víctima [...] pero las víctimas no saben nada de sus tratantes.” (p. 182).

En relación a lo anterior, se observa cómo este conocimiento no es recíproco y además como dicho conocimiento obtenido por el tratante tiene intenciones de manipulación lo que no sería un enriquecimiento de interacción sino un engaño, ultraje, manipulación, y traición hacia el otro ya que no solo entra  a conocer a la víctima sino también se aprovecha de la información, de sus necesidades, entre otros.

Otros de los aportes que ofrece Aguirre y Jaramillo (2006) que se consideran fundamentales es cómo por medio del rostro y una interacción directa con el otro se obtiene más información, aun así cabe citar que “ La palabra sobre el ser humano tiene que estar pronunciada mirando el rostro de otro; el rostro es quien valida mi discurso. Todo discurso pronunciado de espaldas al Otro, así sea útil, es un discurso falto de compromiso y, en ese sentido, un discurso ajeno al hombre y mujer concreto.” (p.16) Así pues, en relación con la trata de personas es interesante analizar cómo se lleva a cabo esta información asimétrica  de víctima al victimario, y hasta qué punto la condición humana ha llegado para tergiversar la buena utilidad del lenguaje y conducirla a usos ruines que lo único que busca es afectar de manera negativa la integridad, privacidad y dignidad de una persona que solo busca maneras de suplir sus necesidades como todo ser humano.

5. Al inicio del semestre nos planteamos una pregunta la cual se convirtió en un reto y era poder contestar ¿Cómo se explica o como se comprende la constitución social del humano en la problemática actual de la Trata de personas en Colombia?, hoy luego de cuatro meses hemos llegado a la conclusión que lo mejor para dar esta respuesta es tomar algunos de los aportes teóricos de un autor específico de los cuales fueron revisados en la asignatura en curso, y considerando este tema trabajado y las diferentes opciones de autores consideramos que lo mejor es tomar los planteamientos de Michel Foucault ya que es quien explica de una u otra manera lo que sucede en la relación que existe entre los proxenetas y las víctimas de la trata de personas mediante las relaciones de poder.

Las relaciones de poder como ya se explicó son las acciones que ejercen los opresores indirectamente sobre las acciones de los otros hacia los oprimidos (Foucault, 1991). Gracias a esta definición nos permitimos entender que en el delito de la trata de personas las relaciones de poder actúan sobre las acciones de las víctimas para de esta manera lograr que éstas obtengan las ganancias que los proxenetas y tratantes quieren de este negocio.

Según lo anterior y teniendo en cuenta el artículo de Flamtermesky las relaciones de poder presentes en este delito deben ser acabadas mediante acciones de resistencia como es la IAPF que se propone según la autora luego de realizar su investigación (2014). Asimismo es importante hacer énfasis en que el contexto ayuda de manera directa a que estas mujeres que en algún momento fueron víctimas dejen de ser invisibles en esta sociedad ya que si son visibles de esta manera podrán “luchar” para que este delito se acabe y de esta manera se genera resistencia ante los mecanismos de poder establecidos. Por tanto,  es fundamental permitir que la sociedad tenga una participación activa con estas mujeres ya que así es posible generar conciencia y permitir que se acaben los clientes de la trata ya que “Sin clientes no hay trata”.

También, es importante aclarar que desde la perspectiva de Michel Foucault estas relaciones de poder al fin y al cabo son gran parte de nuestra construcción como seres humanos. Por tanto, es tan complicado responder esta pregunta, puesto que las víctimas de trata están sometidas a un trato de inferioridad, incertidumbre, vulnerabilidad y como bien lo señala el artículo de Hurtado y Pereira (2012) “Las víctimas se alimentan poco y que entre cinco y seis comparten un mismo lugar de alojamiento, y ninguna contó con servicio de salud o seguridad social alguno.” (p. 187).   Por tanto, se constata, que las condiciones de vida en que ellas están sometidas, no garantizan una buena calidad de vida. Como se mencionaba en el punto anterior, la verdadera problemática se genera no en la actividad como tal de prostitución porque las fin y al cabo muchas de las víctimas caen en estas redes en busca de este tipo de actividades laborales, sino en el trato deshumano que se le dan a las personas.

Por otro lado, es fundamental considerar la importancia de nuestro contexto en esta problemática, como Foucault lo menciona respecto al estudio de nuestra historia y nuestra cultura para saber nuestras conceptualizaciones del mundo y en este caso de esta problemática. Es necesario estudiar las causas originarias de este fenómeno mundial que nos afecta a todos y que principalmente nuestro país es uno de los más implicados en estas organizaciones ilícitas.

 Así pues finalizamos con otro interrogante que reflexivo que orienta más nuestra respuesta al interrogante acerca de la explicación y comprensión de lo humano en la trata de personas, y es ¿hasta qué punto la humanidad será tan indiferente al daño ajeno que en un futuro, simplemente se pierda lo humano y esa empatía por el otro, solo por la razón de conseguir un bienestar propio sin tener conocimiento que el verdadero bienestar es generado por la reciprocidad de relaciones equitativas las cuales si se da una acción buena como resultado se generará otra buena? ¿Hasta cuándo comprenderemos la importancia de la interacción y el enriquecimiento que recibimos a diario, solo con compartir con una persona y el efecto que podemos generar en esta en su construcción como sujeto?

REFERENCIAS.

     Flamtermesky, H. 2014, diciembre. Mujer frontera. Experiencia de Investigación Acción Participativa Feminista (IAPF) con mujeres víctimas de la trata de personas. Athenea Digital. (14). p 13.

Foucault, Michael (1991). El sujeto y el poder. En: El sujeto y el poder, pp.51-69,  Bogotá, Carpe Diem Ediciones. Disponible en:

     Hurtado, M. y Pereira, C. (2012). Dinámica del comercio ilícito de personas: el caso de Colombia-Oriente Asiático. Colombia internacional 76. (p. 167-194). ISBN: 0121-5612. Recuperado de: Fuente Académica,  https://bases.javeriana.edu.co/f5-w-687474703a2f2f6564732e622e656273636f686f73742e636f6d$$/eds/pdfviewer/pdfviewer?sid=af0731e1-ff42-4a76-8d86-b07e809b5204%40sessionmgr112&vid=3&hid=126

García J.C. y Jaramillo L.G (2006). El Otro en Lévinas: una salida a una encrucijada sujeto-objeto y su pertinencia en las ciencias sociales. Revista Latinoamericana en Ciencias Sociales y Juventud, Julio-diciembre, año-vol. 4 No.2, Universidad de Manizales. Disponible en: http://www.umanizales.edu.co/revistacinde/vol4/Juan%20Carlos.pdf